El Museo Picasso confía el control de calidad de la imagen digital al CITM

¿Cómo podemos asegurar la calidad de la reproducción digital de obras de arte? ¿Qué tipo de cámaras y ópticas deben usarse y como deben calibrarse? ¿Cómo debe gestionarse el color? Estas y otras preguntas se plantearon en el Museo Picasso de Barcelona cuando decidieron apostar por la imagen digital.

Debido a la falta de estándares internacionales que sirvieran de referente, el Museo Picasso pidió la colaboración del Centro de la Imagen y la Tecnología Multimedia (CITM), de la Universitat Politècnica de Catalunya, para hallar las respuestas a dichas preguntas. Sílvia Domènech, responsable de Conocimiento e Investigación del Museo justifica y explica esta elección afirmando que «los verdaderos conocimientos técnicos están en la universidad, así es que me puse en contacto con los expertos, les expliqué nuestras ideas y nuestras preocupaciones al respecto (?) y firmamos un convenio de colaboración con el CITM».

Acto seguido, el Laboratorio de Calidad de la Imagen (LQI) del CITM, con el profesor Carles Mitjà en el frente, elaboró para el Museo tres protocolos de actuación que establecen las condiciones, los límites y las metodologías a seguir en la reprografía digital de la colección de arte, en la reprografía de su fondo documental y en otras actividades fotográficas en las instalaciones del museo, para garantizar la calidad.

Actualmente el CITM está implementando los procesos descritos en dichos protocolos en las diferentes fases de encargo y utilización de imágenes. Ya ha calibrado las máquinas de los fotógrafos y ahora está diseñando la organización del archivo fotográfico y trabajando para una correcta recepción, comprobación, utilización y redistribución de los archivos digitales.

De esta forma, el CITM transfiere sus conocimientos al Museo Picasso pero aprende, a su vez, de un caso práctico y canaliza el conocimiento adquirido hacia su alumnado. «Para nosotros esta es quizás la aportación más valiosa de las actividades derivadas del convenio», afirma Carles Mitjà, «ya que nos permite conducir el Grado en Fotografía y Creación Digital hacia la formación de futuros profesionales que puedan dar respuesta a las necesidades mencionadas y técnicos capaces de garantizar el cumplimiento de las condiciones de calidad más exigentes».

Desde su creación en el año 2003, el LQI ha llevado a cabo varios trabajos para instituciones, como el apoyo a la Fundación Instituto Amatller de Arte Hispánico para la creación del departamento de digitalización y la adquisición de equipos, el apoyo a la Diputación de Girona para la calibración de escáneres o la colaboración con la empresa Genomvisió captando imágenes de gran aumento.